Carballeira de Abedim

SAN MARTIÑO DA PEÑA DA RAÍÑA

El nombre del lugar Abedim, según la leyenda, proviene de Abydis, un mítico rey que nació en este lugar, aunque en realidad es que proviene del árabe y significa el culto.

Subir al alto da Peña da Raíña, en la cima del monte de San Martiño o de la Peña da Raíña, nos permite conocer un antiguo "castelo roqueiro" y al mismo tiempo disfrutar de magníficas vistas panoramicas de la región.

Antiguamente, el Castelo era sede del juzgado da Peña da Raíña, cuya área cubría el actual concello de Monção hasta el rio Mouro, terminando en Merufe. En esos tiempos, la población tenía tal importancia que el propio obispo de Tui, Don Pedro I, consagró la iglesia de San Martiño, en 1204. En 1268 recibió la carta de manos de Don Afonso III de Portugal, que fue el 5º rey de Portugal. Era el segundo hijo de Afonso II y de su mujer, Urraca de Castilla (no confundir con Doña Urraca de León, que fue reina de Galicia y que nació 100 años antes). Más tarde, se extinguió el juzgado y el poblado desaparecio totalmente, cayendo en ruínas (sucedió cuando los reyes de Portugal fortificarion Monçao).
La parroquia de S. Martiño da Peña da Raíña fue una de las que Don Dinis cedió al obispo de Tui, en 1307, a cambio de las parroquias de las iglesias de Castro Laboreiro y Monção. Dinis I de Portugal (Dionisio), apodado el Labrador (1261/1325), era hijo del rey Alfonso III y de su segunda esposa, Beatriz de Castilla, sucedió a su padre en el trono de Portugal en 1279.

Ya en el inicio del siglo XVIII el párroco de la freguesia de Abedim uso las piedras de las ruínas para restaurar la iglesia parroquial.
Actualmente, de esta importante fortificación no queda más que el lugar, aunque se puede vislumbrar pequeñas marcas de una muralla y, en una colina rocosa, los restos de una antigua torre del homenaje.

En de la parte sur, existe el llamado Jardín de la Reina y la modesta capilla de San Martín, última preciosidad digna de admiración. La capilla actual data del siglo XVIII o XIX. No queda nada del templo original.
Explorando los rincones del lugar, descubrimos puentes entre las enormes rocas y pequeños miradores naturales donde la vista es aún más hermosa.

Al final de los actos religiosos que aquí se celebran, por lo general los devotos suben una pía excavada en una roca en la parte superior de la ermita donde, mantiene la tradición, San Martín de Braga estuvo sentado, también conocido como Martín de Dumio o Martín Dumiense (Panonia, hacia 510 – Braga, 580), fue un obispo, teólogo y escritor eclesiástico hispanocatólico de origen panónico (actual Hungría), llamado el «Apóstol de los suevos.