Iznate. Loma de Barcos

Paseo que surge en un domingo en el que apetece salir a dar una vuelta y ver que hay, por ejemplo en Iznate. Así que, dicho y hecho, nos plantamos en el pueblo y aparcamos justo a la entrada en la que hay unas pocas de plazas habilitadas para ello. Recomiendo que bajo ningún concepto queráis adentraros en el pueblo con el vehículo, por suerte, y porque he tenido muchas malas experiencias anteriormente, no lo hice, y ya os daréis cuenta cuando caminéis por sus calles que si hay pueblos con calles empinadas, Iznate no se queda atrás.
Después da aparcar, elegí un trazado que salía del mismo pueblo para estirar las piernas.
Iznate es un pequeño pueblo de casas blancas y calles serpenteantes de pasado andalusí, rodeado de viñedos, almendros y olivares. Pertenece al interior de la comarca de la Axarquía es conocido por su uva moscatel, de la que se elabora pasas y vino, y por su hermoso entorno natural.
Este trazado discurre por las calles del pueblo y se encamina a la Loma de los Barcos o el Mirador Iznate-Marruecos. Desde este punto se obtienen unas vistas excepcionales de las Sierras de Tejeda y Almijara, de los pueblos de alrededor y del mar Mediterráneo. Incluso se puede apreciar la costa marroquí y la cordillera del Atlas en días despejados, aunque no ha sido nuestro caso, ya que ha sido un dia bastante gris.
El trazado tiene un punto en que sale a la misma carretera y, aunque indicaba un punto de subida por su izquierda, un movimiento de tierra realizado para poder cultivar, había borrado la senda, si es que la había, por lo que continuamos mas adelante para subir por donde había pasado alguna cabra hasta otra zona alta que pudimos continuar por carriles pegados a fincas privadas con mas de un perro suelto. Uno quiso acompañarnos amigablemente, otro se tumbó para que le rascase, paro también hubo que convencer a una cuadrilla de 6 de todos los tamaños que decidieron que por allí no se pasaba.
Al llegar a la Loma de barcos , nos encontramos un hito y una zona con bancos. Las vistas son muy bonitas, pero la construcción que han puesto de base a unas antenas lo afea bastante.
Volvimos al pueblo para degustar nuestro tapeo como corresponde y listo. Un domingo muy relajado.